PAULA MARCELA DEPALMA.- En la última entrada hicimos referencia a la familia como hospital y como escuela, y señalamos las implicaciones de la vida laboral en la familiar según el pensamiento del papa Francisco.
Ahora, desde la Evangelii gaudium, recuperamos algunas situaciones de debilidad, como la pobreza o las distintas limitaciones culturales que determinan la vida en familia, también desde el pensamiento del Papa argentino.
La familia ante la crisis cultural
A pesar de hablar sin interrupción sobre la familia en sus discursos, en la exhortación Evangelii gaudium Francisco no se detiene demasiado sino a través de una síntesis de la situación de debilidad en medio de la crisis cultural.
"La familia atraviesa una crisis cultural profunda, como todas las comunidades y vínculos sociales. En el caso de la familia, la fragilidad de los vínculos se vuelve especialmente grave porque se trata de la célula básica de la sociedad, el lugar donde se aprende a convivir en la diferencia y a pertenecer a otros, y donde los padres transmiten la fe a sus hijos". (EG 66)
Además de las situaciones de pobreza y violencia que sufren las familias y que ponen en serio peligro el desarrollo de sus miembros, nos enfrentamos ante una crisis cultural que afecta a los vínculos entre los cónyuges. Re-aprender a convivir en un contexto de crisis cultural es un desafío bastante alto en cuanto a generación de nuevos vínculos que quieren ser permanentes en el cambio.
¿Sínodo sobre las familias o sínodo sobre la Iglesia?
Por último, me gustaría abrir un debate sobre el “desde dónde” de la cuestión. ¿Por qué la Iglesia quiere dar una palabra sobre la familia? ¿Desde dónde lo hace?
Retomo la pregunta de Carmen Peña García, perito del sínodo sobre las familias, en Misión Joven nº 462. ¿Sínodo sobre las familias o sínodo sobre la Iglesia? Su respuesta es clara: no se trata solo de poner la mirada en la realidad de la familia con realismo, sino principalmente de “revisar la actuación pastoral de la Iglesia respecto a los fieles, en sus concretas situaciones familiares”.
Se trata de un sínodo sobre una Iglesia que necesita revisarse y convertirse en cuanto a sus acciones pastorales en relación a las diversas situaciones familiares. El reto es para las familias y especialmente para la Iglesia. Es el reto de encontrarse y encontrarnos de una manera nueva dentro de este cambiante escenario social y cultural.